La Asamblea General estableció en 1946 la Junta de Auditores de las Naciones Unidas (BoA, Board of Auditors, por sus siglas en inglés), la cual está compuesta por los Jefes de las Entidades Fiscalizadoras Superiores de tres Estados Miembros. La Junta certifica las cuentas de las Naciones Unidas, sus fondos y programas (incluido el PNUD) y proporciona informes que abarcan una amplia variedad de auditorías financieras, de gestión y de relación entre calidad y precio. El objetivo central de la Junta es utilizar la perspectiva única de la auditoría externa pública tanto para ayudar a la Asamblea General a responsabilizar a las entidades de las Naciones Unidas por el uso de los recursos públicos como para agregar valor al identificar maneras de mejorar la prestación de servicios públicos internacionales.