El control interno es un proceso, efectuado por un órgano de gobierno, la dirección u otro personal de una organización, diseñado para proporcionar una garantía razonable sobre la consecución de los objetivos en las categorías de (i) eficacia y eficiencia de las operaciones, (ii) fiabilidad de la información financiera, y (iii) cumplimiento de las leyes y reglamentos aplicables.