Durante el transporte y el almacenamiento, toda carga es vulnerable a una serie de riesgos, tales como daño, robo y hurto, rotura, falta de una parte o de un envío entero. El seguro de carga proporciona la protección contra pérdidas financieras potenciales resultantes de tales riesgos. Las Unidades de negocio deben garantizar lo siguiente: a. La protección de los bienes sujetos a riesgos, entre ellos, guerra, huelgas, motines o tumultos sociales; b. La duración de la cobertura del seguro debe ser suficiente para cubrir el período del transporte de depósito a depósito, incluido un mínimo de 30 días, estimado para el almacenamiento en el sitio de destino; c. Los bienes deben asegurarse por el valor del costo, seguro y flete (CIF), más un porcentaje convenido, generalmente el 10 %, para reflejar el costo indirecto de los imprevistos de la Unidad de negocio para cubrir o reponer los bienes.